MACETA ARECA

5,00 (IVA incluido)

Chrysalidocarpus lutescens

Agotado

Descripción

Maceta pequeña (10,5 cm)

También conocida como palmera amarilla o palmera mariposa, la palmera areca es una de las mas elegantes y populares. Tolera el medioambiente de los interiores, libera copiosas cantidades de humead en el aire, elimina las toxinas químicas y también es agradable a la vista. Es una de las palmeras de rápido crecimiento. Muestra un grupo de tallos parecidos a cañas que producen hojas como plumas de un verde amarillo. Debido a sus muy completas cualidades, la areca se encuentra habitualmente en establecimientos comerciales como en los hogares. El pothos y la hiedra de interior combinan su atractivo estético. En el interior de la casa, una palmera areca de 1,8 metros transpira aproximadamente un litro de agua cada 24 horas. La areca ha sido valorada sistemáticamente como una de las mejores plantas de interior en lo que respecta a la eliminación de todas las toxinas del aire de interiores con que se han hecho pruebas. También posee la capacidad exclusiva de trasladar las acumulaciones de salea a ramas seleccionadas. cuando éstas están saturadas, mueren y deben quitarse rápidamente. Su alta puntuación en todas las categorías de valoración hacen de la areca una de las primeras plantas de interior eco favorables.

Planta valorada en el estudio para la NASA de B. C. Wolverton con un 8,5 sobre 10. En eliminación de vapores químicos, facilidad de cultivo y mantenimiento, resistencia ante plagas e índice de transpiración.

Luz semisol
Temperatura entre 18 y 24 ºC
Plagas. Las arañas rojas y las motas marrones en las hojas se deben a una atmósfera excesivamente seca.
Mantener húmedo el bulbo de la raíz. Poner un fertilizante completo como Ecomix, de forma regular.
Rociar con agua regularmente para darle un aspecto fresco y para obtenerla humedad que ahuyente las infestaciones de insectos.
Se precisa de un buen abono con base de marga para recipientes convencionales. Los recipientes hidrojardineras son muy recomendables dado que la areca tiene un índice alto de transpiración, requiriendo riegos menos frecuentes.